Cubadebate

Creo que la educación cubana tiene que dar un giro de 360 grados, temas como la inteligencia emocional deben ser algo con una profunda integración en todas las materias escolares y en cualquier nivel escolar, las personas necesitan mas educación social, para que aprendan ser mas felices mas proactivos, si usted le enseña al hombre las herramientas básicas para las relaciones humanas, obtendrá inevitablemente personas mas disciplinadas, mas capaces, mas motivadas, personas capaces de liderar cuando le corresponda y personas capaces de ser lideradas cuando le corresponda.

Coincido en que hay qie contribuir a la formación de líderes desde edades tempranas en cada uno de los colectivos pioneriles. Dejar de formar Jefes de Colectivos, Emulación, Actividades ...etc, y enseñarles a movilizar las masas estudiantiles, a preocuparse y ocuparse de los problemas de su colectivo pioneril, dando soluciones creativas donde sean entes activos y no repetidores de lo que orientan los guías pioneriles que no siempre son líderes emprendedores, ni creativos y generalmente dogmáticos.
Si se alcanzara esta meta, creo que se podría garantizar la continuidad de líderes en los otros
niveles de enseñanzas y en las bases , que es donde, según mi modesta opinión, se encuentran más jefes conformistas, que no escuchan los problemas de sus trabajadores, evaden el debate
con ellos y esperan cómodamente las orientaciones de niveles superiores como bien los describiera Raúl en su informe al octavo congreso partido. Algunos participan en muy pocos trabajos voluntarios junto a sus trabajadores aunque convocan a muchos , porque también algunos Secretarios Generales de la CTC, no son siempre los líderes dentro de los colectivos de trabajadores. pues los que lo son, evaden la responsabilidad. De ahí que muchos secretarios ceden a las presiones de los jefes por no buscarse problemas, se alejan de su misión principal. Y el trabajador sigue siendo convocado a tareas sindicales y dirigido siempre por una sola persona, el Jefe. Esto trae consigo, en muchos casos, desmotivación y pérdida de conciencia en la actividad que se realiza en los centros de trabajo..
En fin abogo porque se haga una selección adecuada de los cuadros, que antes todo estén preparados e identificados correctamente con el cargo que desempeñarán para ser en cada base líderes que sean seguidos , respetados y admirados por el colectivo de trabajafores

¿Ha logrado la psicología y la sociología métodos y técnicas para medir la capacidad de liderazgo?

De seguro que existen indicadores a nivel mundial, estudiados por psicólogos y sociólogos, derivando en hipótesis que se transforman en métodos y factores relativos a desarrollar para promover un liderazgo que cumpla los objetivos que el sistema desea. Pero esas investigaciones sistemáticas siempre son subjetivas y condicionadas a los parámetros iniciales o asumidos para conducir la conclusión. Realmente, quiero expresar que los estudios del ser humano y su relación con la sociedad, son importantes y tienen su objeto y provecho, pero personalmente pienso que se enfoca más en procesos y sistemas que derivan en la conducción de acciones de las personas en rol de liderazgo. Y realmente cuenta más la experiencia y actitud de la persona en el rol, cuando se puede evaluar en el tiempo su real impacto y legado. Por ejemplo, el equipo de béisbol nacional susceptible de ser estudiado por psicólogos y sociólogos, puede derivar en un manual y procedimientos para el manager y los jugadores en función de recuperar glorias pasadas. Difícilmente reúna, eligiendo en base a indicadores, a jugadores niños y un grupo de coaches niños para formalos como líderes con métodos y prácticas, y luego llevarlos a un campeonato mundial. Mi opinión, es que alguien con experiencia, por ejemplo unos 40 o 50 años, puede desarrollar una formación de 10 a 15 años, a grupo de niños y obtener en el tiempo mejores resultados que por un método o técnicas con indicadores de liderazgo.

¿Nuestro sistema educativo tiene mecanismos para detectar tempranamente aquellos que muestran desde la infancia, inclinación y talento para la dirección de personas?
En Venezuela, considero en base a mi experiencia, que el sistema educativo no está dispuesto con este objetivo. Si entiendo que se ha dispuesto cambiar en función de una formación más integral, y estimular habilidades y capacidades que contribuyan con la sociedad.

¿Qué sabes sobre el neuroliderazgo?
Como término de neuroliderazgo, no podría definirlo. Pero en la oportunidad de formación que tuve de liderazgo, recuerdo claramente el término de "inteligencia emocional", que refirió primero Adrián. Y básicamente es una estudio de investigación sistemática desde la psicología del ser humano, la gestión de las emociones alegría, tristeza, rabia y miedo, la relación de los tres tipos de cerebros, como reacciona el ser humano a diferentes escenarios. Estudiar el equipo de trabajo desde su inteligencia emocional para lograr objetivos en función de sus habilidades y capacidades, y estimularlos con un propósito. Gestionar las emociones puede ser muy útil pero se puede alcanzar insensibilidad, generar un ambiente de mucha armonía laboral, pero con sacrificios familiares. En mi concepción, es una arista de discusión para el liderazgo innato y el desarrollado.

Líder no es lo mismo que director o jefe, el director se puede designar pero el líder no. El líder aglutina, convoca, implica, compromete, y eso es así porque genera la motivación y la confianza en las personas. El jefe manda y la gente obedece, pero solamente el líder logra que den ese “extra” que no lo saca ningún salario ni ningún jefe. Ese es el verdadero liderazgo.

Tanto para ser directivo como para ser líder hay que tener el talento necesario para eso, después la academia te enseña a emplearlo mejor. Pero si no sirves para jefe, puedes pasar todas las academias y todos los cursos que no lograrás ser un buen dirigente.

Las condiciones para que una persona sea un líder la dan las aptitudes y las actitudes, la manera en que logra empatía con los demás miembros del equipo, y logra la motivación en función de los objetivos.

No siempre coinciden el director y el líder en la misma persona. Hay directores que no son líderes en su empresa, el liderazgo no sucede siempre, no es algo que se ostenta en todo momento como un grado militar, el liderazgo tiene sus momentos y sus circunstancias en las que se manifiesta y hace que una persona se convierta en líder de algo.

El líder casi siempre existe, dentro de un departamento, dentro de una brigada, es una forma natural. El director inteligente debe saber utilizar las capacidades de los líderes en su entidad y no competir con ellos sino sumarlos.

Gracias estimado joseantonio por atender mi comentario. Razones como las que comentas hacen necesario mucha más divulgación sobre el asunto hasta crear una cultura, existe mucha confusión sobre el liderazgo. Dirigir es un sistema, el liderazgo como muchos otros, es un instrumento dentro de ese sistema de dirección. Cada instrumento dentro del sistema de dirección tiene funciones y objetivos precisos. El liderazgo como instrumento de dirección actúa como un sistema, el líder es un sistema en sí, pero ninguno sustituye al sistema dirección como tal, el sistema de dirección es más abarcador y complejo. El liderazgo es un subsistema dentro del sistema de dirección. Hoy el liderazgo vive su mayor boom, posiblemente el mayor en la historia de la humanidad, eso lo determina la VELOCIDAD con que se producen los avances tecnológicos y lo agresivo de la globalización, haciendo del emprendimiento y la innovación una actitud OBLIGADA para enfrentar la vida, para desarrollarse, para lograr ser competitivo. Vivimos una brutal dinámica de cambios y avances donde los escenarios en disputa no son el presente, el hoy, ni siquiera el año que viene, esos escenarios ya tienen dueños, esa lucha despiadada se batalla hoy por los grandes y globales escenarios del 2030 y el 2050, algunos miran más lejos. La única forma de hoy poder accionar hoy sobre esos escenarios de futuro en disputa estimado joseantonio, es visualizándolos por medio de sueños, intuyéndolos por medio de los sueños. Por eso es imprescindible el papel de un líder con esos sueños, con esa visualización de futuro que nos arrastre hacia ese emprendimiento. No cabe duda de que esto es especialmente desafiante para todos, máxime en las condiciones en que nuestro país intenta desarrollarse. Cuando una persona se encuentra en unas circunstancias difíciles, como haciendo frente a una enfermedad, viéndose desempleada o teniendo un trabajo en el que cuesta mucho construir un futuro de mejora, la salida y solución es un cambio radical en nuestra actitud frente a lo que hoy nos sucede, un impacto que estimule y pueda favorecer a que salga de nosotros lo mejor que guardamos dentro, esa magia de sacar lo mejor de nosotros y arrástranos la aporta el líderes.
Cuando analizo el liderazgo, hurgo en la vida y las emociones de mis referentes, los primeros; Fidel y Martí. Descubro en ellos dos claves comunes, donde creo se originó como punto de partida esa armazón de emociones que ellos cargaron y justifica tal liderazgo; la capacidad de auto control y la capacidad de automotivación que ambos tenían, suficiente para producir su propia energía para contagiar a los demás, aun en las más difíciles condiciones y sacrificios. Los líderes encuentran en los sueños ese combustible para el liderazgo que abastece a los demás, al creer en esos sueños se muestran seguros y convencidos, con un gran autocontrol cómo escalón obligado para desarrollar la automotivación, porque nadie motiva, ni contagia ni influye sobre la dirección motivacional si antes no es capaz de auto motivarse, como una fábrica que produce motivaciones, un proceso que por sí solo es un subsistema dentro de un sistema-líder en la auto fabricación de emociones. Los sistemas educacionales no enseñan a los niños a desarrollar el autocontrol y la automotivación imprescindibles para emprendimiento, la innovación, el liderazgo y poner así una diferencia en la vida profesional. Porque los sistemas educativos en determinados momentos dan la impresión de que la vida sólo conoce dos estados: el triunfo o el fracaso. Todo individuo u organización se ha visto envueltos en esa dinámica que les lleva a uno de estos dos estados. En ambos casos el factor que ejercerá una influencia decisiva será la confianza o la ausencia de esta, sólo la confianza evita que un infortunio nos convierta en derrotados y permite resistir los duros golpes que a veces proporciona la realidad. La confianza es el nexo que une las expectativas, los sueños con el rendimiento, las inversiones con los resultados, con lo realidad; es el elemento que hace sencillo tomar el control de las circunstancias, sin esa confianza y seguridad en sus sueños el líder no puede conducir al éxito de algo nuevo a individuos, negocios, economías o naciones, todos triunfan gracias a la confianza que sienten en sí mismo o, por el contrario, se hunden porque carecen de ella. De ahí que el principal desafío de los líderes consista en desarrollar y robustecer la confianza como anticipadora del éxito. En el mundo muchas empresas, muchas sociedades hablan de cambios y liderazgo centrados como un mito solo en los resultados positivos que produce únicamente lo económico. Los procesos de cambio cultural, mucho más factibles en el socialismo han de buscar resultados económicos óptimos y más sanos, al comprometerse firmemente en crear un clima donde las personas se sientan ilusionadas y sepan que lo que hacen tiene para ellas un verdadero propósito y un claro sentido. Todos sabemos que, cuando alguien experimenta ilusión por lo que hace, su productividad aumenta, como también aumentan su longevidad y su vitalidad. Algo tan obvio y deseable, pero que resulta tan difícil lograr. Ahí es donde entra la pieza clave, el líder, desarrollando nuestros talentos dormidos, creando una estrategia que nos haga ver el futuro como un desafío ilusionante lleno de posibilidades, eso solo es posible por medio de los sueños, desarrollando el potencial dormido de nuestra imaginación creadora, muchas veces escasa por el modo en el que nos instalamos en lo cotidiano, sin fomentar la inteligencia reflexiva. Al mirar nuestra dirección motivacional bajo un liderazgo nos damos cuenta con toda claridad, que lograr eso supone además de vencer el miedo y las creencias limitantes que nos frenaban para poder actuar de una manera diferente a la que estábamos acostumbrados, genera otro fuerte incentivo al crear esa confianza que permite abrir un horizonte nuevo en nuestra visualización, abriendo más nuestra mente.
Los hombres que subieron a la Sierra Maestra junto a Fidel para cambiar lo que debía ser cambiado, no lo hicieron guiados por leyes, reglas, discursos, filosofía, no lo hicieron por el Marxismo, ellos subieron a la sierra guiados por sueños, convencidos de los sueños de Fidel. Fidel les mostro sus sueños, sus propósitos, su emprendimiento, y ellos lo hicieron suyo, al punto de ser capaces de dar hasta su propia vida por esos sueños. Los sueños son el combustible para esos grandes saltos para poder emprender.