Cubadebate

El actor Joel Casanova. Foto: Dusnier Gamboa Noriega.

• Especial de la Revista Alma Mater

Actor y músico por vocación, a Joel Casanova podemos verlo estos días como el Reinier de la telenovela Vuelve a mirar. El joven, que en la actualidad acapara la atención de la teleaudiencia de nuestro país, comparte su curso profesional hasta la fecha y cómo ha sido lidiar con el reconocimiento del público.

Él –nos cuenta– ha bebido de varias fuentes de aprendizaje actoral; sin embargo, aún laten en su memoria tres experiencias: la tutela del maestro Héctor Echemendía; el grupo de teatro “Olga Alonso”, bajo la dirección de Humberto Rodríguez; y la Escuela Nacional de Arte (ENA).

“Creo que el 'Olga Alonso' ha sido la mayor escuela que he tenido, sobre todo porque era la etapa en que más me interesaba la actuación”, subraya Joel; y señala que gracias a Vuelve a mirar lo reconocen en todos lados y lo llenan de halagos. Su popularidad se ha disparado muchísimo, fundamentalmente en redes sociales, y aunque en ocasiones todavía se siente abrumado por tanta atención, termina siendo una interacción sana y enriquecedora con los espectadores.

La telenovela también ha servido para el crecimiento profesional del joven actor: aparecer en pantalla le ofrece la oportunidad de estudiar su trabajo y mejorarlo, él —apunta— termina siendo su mayor juez. “Al final se aprende mucho, la novela me ayudó en ese sentido. Hubo días en los que tuve 18 escenas y enfrentarlas no fue fácil porque no tenían un orden cronológico, pero resultó muy enriquecedor”.

En la actualidad lo ocupa la música. A pesar de que sigue actuando y está vinculado a varios proyectos televisivos y teatrales, se centra en lograr un mayor reconocimiento para su grupo Café Mambí. Él, un artista que se inclina a dos vertientes del arte, considera que es importante el equilibrio entre ambas. Por lo que, al haber logrado una presencia en la actuación, la música le reclama más de su empeño.

–¿Cómo fueron los inicios de tu carrera profesional?

“Empecé a trabajar con 12 años como actor. Mi primer personaje fue en la telenovela Bajo el mismo sol, con Ernesto Fiallo como director, y a partir de ahí tuve otras oportunidades. Trabajé en Santa María del porvenir, bajo la dirección de Rolando Chiong; y luego en La otra esquina, de nuevo bajo la dirección de Fiallo.

“Mi primer protagónico lo tuve con 14 años, en el teleplay XP+2, dirigido por Heiking Hernández. Después de graduarme hice teatro con el musical El espejo, dirigido por Marian Montero, seleccionada en su momento como la mejor obra del año”.

–¿Cuáles medios han ayudado a tu reconocimiento como artista?

“La televisión. El personaje de Reinier me ha ayudado mucho en ese sentido, es el que me ha dado a conocer a nivel nacional. Además, he participado en otros proyectos como Sácame del apuro, Cuando una mujer, escenas pequeñas en SOS Academia y otros programas.

“El teatro ha sido otro espacio que me ha favorecido, pero de forma más limitada. Pertenezco al grupo Teatro de la Luna, de Raúl Martín, y estoy trabajando con el grupo de teatro de Osvaldo Doimeadiós”.

–¿Cómo llegaste al personaje de Vuelve a mirar? ¿Qué representó para ti esta experiencia?

“La oportunidad me la dio Ernesto Fiallo al llamarme para hacer el personaje de Marlon; David Pereira iba a ser Reinier, pero él estaba en Lucha contra bandidos y nos intercambiaron los roles.

“Esta experiencia ha sido lo más grande que me ha pasado, hasta el momento, en mi corta carrera. Es impresionante el cariño del público en la calle y en las redes. Estoy muy feliz por eso, y por trabajar con actores a los que he admirado desde niño. Es increíble el estar cerca de ellos y compartir escenario.

“Estoy muy agradecido con el resultado y con todas las personas que ven la novela y me felicitan cada día, pues al ser mi primer gran trabajo, estaba muy inseguro con la acogida que iba a tener”.

–Formas parte del equipo de actores de una nueva telenovela, cuéntanos un poco de esta experiencia.

“Sí, estamos en el proceso de rodaje de Asuntos pendientes, que es su nombre de producción, bajo la dirección de Felo Ruiz. El guion es de Yamila Suárez, y la dirección de actores de Tamara Castellanos.

“El personaje que interpreto se llama Alexis y es mucho más pequeño que Reinier. Además, son muy diferentes porque Alexis es más jaranero, más despierto, más espontáneo. La verdad es que estoy muy feliz con este proyecto que me ha dado la oportunidad de trabajar con actores de la talla de Fernando Hechavarría, que fue mi maestro en cuarto año de la ENA.

“También he conocido a otros jóvenes y excelentes actores como Yia Caamaño, Andro Díaz, Flora Borrego y Belissa Cruz. Esperemos que el proyecto continúe como hasta ahora, debe salir al aire luego de Tú, la próxima telenovela que estará en pantalla, de Lester Hamlet”.

Joel Casanova. Foto: Dusnier Gamboa Noriega.

–¿Cómo llega la música a tu vida?

“No soy músico de formación sino de alma; me gusta mucho la música, más que la actuación, es lo que siempre quise ser de niño, pero no pude entrar a la escuela y aprendí a tocar guitarra tarde.

“Tengo un grupo que se llama Café Mambí, es una banda grande en la que hacemos canciones de mi autoría y de un hermano que está ahora en España. Intento salir adelante con el grupo. Empezaré mi primera producción con Bis Music, de la mano de José Manuel García, un destacado productor cubano. Estoy muy contento con lo que está pasando con mi vida y la música, que es lo que más quisiera defender”.

–¿Hacia dónde va tu carrera?

“La verdad no lo sé. Quiero tratar de seguir haciendo las dos cosas, la música y la actuación. Ahora estoy más enfocado en la música porque he tenido más oportunidades en la actuación. Si bien he tocado en lugares, no he dado el salto a lo profesional, a ser reconocido, a tener una empresa, un video clip. Espero que ambas carreras sigan en ascenso”.

–¿Quién es Joel Casanova? ¿Cómo te definirías?

“Soy un muchacho normal, sencillo y, sobre todo, muy cubano y con muchos sueños por cumplir. Si hay algo que podría definirme es nunca parar de soñar y nunca parar de ser feliz”.